Según el Banco de España, los precios de la vivienda han bajado un 34,4% desde el segundo trimestre de 2008, cuando comenzó el proceso de ajuste de los precios de la vivienda.
Su Informe Anual 2012 indica que esta tendencia a la baja ha continuado en el inicio de 2013 a un ritmo ligeramente más atenuado. La Comisión Europea también coincide con el Banco de España, ya que prevé que los precios de la vivienda seguirán cayendo al menos hasta 2014. En cambio, Bruselas calcula que el descenso acumulado desde 2007 apenas supera el 30%.
Por otro lado, el informe del Banco de España asegura que en 2012 la inversión residencial continuó limitada por la profundidad de la corrección de los excesos inmobiliarios del pasado, y retrocedió por quinto año consecutivo.
No obstante, el banco advierte de que el mapa nacional describe escenarios bien distintos, ya que el grado de absorción de las viviendas no vendidas “sugiere que el eventual punto de reactivación de la inversión residencial puede llegar antes en unas zonas geográficas que en otras”.
El informe aprecia una elevada concentración del exceso de oferta en regiones costeras con una alta presencia de segundas residencias, en las que el auge inmobiliario fue especialmente intenso, y el volumen actual de compraventas de vivienda nueva, muy reducido. Otras regiones, como Madrid, Aragón, País Vasco, Asturias y Galicia, se caracterizan por tener un volumen de viviendas sin vender “mucho más reducido en relación con el parque total”.