Existe una diferencia importante entre las propiedades de primer nivel y las demás en el mercado inmobiliario europeo, por lo que los precios de los mejores activos suben, mientras que el resto seguirá bajando.
Actualmente los principales vendedores son los bancos, que a partir de la crisis financiera y los problemas de las constructoras han tenido que absorber este tipo de activos.
Debido a la reducida cantidad de inmuebles que cumplen los requisitos de los inversores, los activos de primer nivel se estabilizarán o elevaran su valor en función del país en el que se encuentren, señala el analista de JPMorgan, Harm Meijer.
Fuente: El Confidencial